Esta infección está causada por el virus del papiloma humano. Permanece en la epidermis y dermis, no llegando nunca a capas más profundas. Su apariencia es una acumulación de puntos negros, que al deslaminarse producen un sangrado. Suele sentirse dolor al pellizcar, no al apretar.
Pues bien, se van a ocasionar por contagio directo cuando el pie, ya sea a través de grietas o heridas, entra en contacto con el virus.
Si padecemos este trastorno deberemos someternos a tratamiento. Deberemos consultarlo con un podólogo, que puede aconsejarnos realizar quemaduras químicas, quemadura térmica o tratarlo mediante la aplicación de diversas sustancias. En el caso de que los tratamientos previos no funcionen podría recurrirse a la cirugía. En nuestra clínica de podología en Lugo, analizamos tu caso concreto para adaptar el tratamiento a tus necesidades.
Como siempre, es mejor prevenir que curar y podemos seguir unas pautas de higiene rigurosa en nuestros pies para evitar el contagio. Ahora que se aproxima el verano, es importante tener presente que no debemos andar descalzos en zonas de agua estancada frecuentadas por mucha gente y siempre utilizar chanclas, que serán nuestras mejores aliadas en la prevención de infecciones en los pies. Además debemos cuidar nuestros pies, aplicando diariamente crema hidratante en los talones y zonas de durezas y curar cualquier herida que podamos detectar. Y como siempre repetimos, utilizar un calzado adecuado y unos calcetines que permitan a nuestros pies transpirar y evitar el sudor, lo que sera importante sobre todo en verano.
En nuestra Clínica de Podología O Camiño en Lugo estaremos encantados de atender cualquier duda que tengas al respecto y de darle tratamiento a los papilomas de tus pies.